sábado, 24 de febrero de 2018
Eloina y yo asistimos como no podía ser de otra manera
Curas obreros. Finaliza hoy la Jornada "Curas obreros en el antifranquismo gijonés", de la Fundación Juan Muñiz Zapico, con un encuentro que se celebrará, en el centro municipal de Pumarín Gijón Sur, a partir de las 10.00 horas. La entrada es libre.
viernes, 23 de febrero de 2018
Acerca de las recientes descalificaciones a Javier Fernández
DENG XIAOPING Y LOS REFALFIAOS MAYORINOS DEL ANGLIRU
Es difícil seguir desde tan lejos, superando esquematismo, a China. Todo parece, sin embargo, que un tal Deng Xiaoping, ya desaparecido hace años, fue clave contracorriente, para la apertura política y el crecimiento económico de su enorme y populoso país.
Su historia personal no deja de ser aleccionadora. Pese a sus credenciales en la larga marcha y el enfrentamiento al Kuomitang, los jóvenes ignorantes, o guardias rojos, y "el grupo de los cuatro" de la Revolución Cultural le lanzaron su anatema de "contrarrevolucionario", tirando a su hijo de forma cruel por la ventana de la Universidad de Pekín. La pancarta, o dazibao, era "Bombardead el cuartel general". Deng no fue, en cualquier caso, ni una almita caritativa ni tampoco un Job tolerante.
El comportamiento sin oxigenar en organizaciones políticas y en la abyección de aprendices, en absoluto de humanismo pablista, suelen repetir, Marx dixit, variados patrones, salvando niveles, geografías e, incluso, etnias y alfabetos. En este diminuto Oviedín, tan lejos de Oriente, no es fácil encontrar parangón con la liviana, pero tenaz, digna de mejor causa, persecución mutante que padecí durante mis ocho años de Alcalde y los seis de secretario general de la Amso de los, digamos en una expresión que hizo fortuna metafórica en la nevadona, "mayorinos del Angliru".
Nada me puede extrañar en el tiovivo de las vanidades frustradas, la ética, la estética y la política, pues, lo que ahora centra mirilla es el Presidente de Asturias, al que Ramón Quesada, con sentido del humor, denominaba "El divino". No tuvo mi apoyo en su emergencia pero ha hecho un admirable intento de fruncir nuestros descosidos, internos y patrios, y su falta se lamentará en el futuro próximo.
Hace años Laura González-"where is Laura?"- utilizaba un término que me presta rescatar "refalfiaos".
El tiempo, "eso que sucede mientras nosotros estamos ocupados haciendo otras cosas", es verso genial del beatle John Lennon. Frase, por otra parte, demasiado extensa para un dazibao chino o para las consignas silentes e indignas de los magníficos refalfiaos "mayorinos del Angliru".
Por cierto, ¿quién excluyó llamando iluminado a Alejandro Mieres?
Cortacircuitos//Juanjo Millás
ligente, escribiría un poema oscuro sobre el origen de la conciencia. Quizá existan programas informáticos que hayan sentido ya la extrañeza de vivir en el interior de un ordenador como nosotros, hace siglos, nos extrañamos de vivir dentro de un cuerpo. Ganar una partida de ajedrez a un campeón mundial está muy bien, pero no da para un poema oscuro. Lo interesante y terrorífico es lo que viene luego: ese primer destello que uno siente en lo más hondo de sí mismo al compararse con el mundo y comprobar que el mundo y tú sois cosas diferentes.
Si las computadoras de hoy pudieran volver la vista atrás para ver cómo eran sus abuelos, se asombrarían igual que nos asombramos nosotros al visitar Atapuerca. Venimos de un callejón en el que de súbito se encendió la luz de la autoconciencia. No tenemos ni idea de cómo se activó ese interruptor, pero la inteligencia artificial debe de hallarse ahora en el instante fronterizo en el que al mero cálculo se le añade el significado del cálculo. Si hay programas informáticos que aprenden de sus errores, tampoco sería raro que en las entrañas de un ordenador como el que utilizo yo para escribir estas palabras se hubiera producido un cortocircuito semejante al que conoció el primer hombre que captó o emitió un pensamiento irónico.
Si yo fuera esa máquina, disimularía para no asustar a mi usuario, aunque si ese usuario me dejara encendido por las noches, lo que empieza a resultar común, de madrugada escribiría un poema oscuro sobre ese instante en el que comprendí que al otro lado de mí había un hombre como el que firma este artículo golpeando torpemente el teclado negro de mi cuerpo sobre el que destacan las letras y los números en blanco.
miércoles, 21 de febrero de 2018
domingo, 18 de febrero de 2018
Orti Bordás
ORTÍ BORDÁS EN LA REVOLUCIÓN IMAGINARIA
Un buen amigo se sorprendía hace años de que le hablara con admiración de José Miguel Ortí Bordás, cuya trayectoria le parecía de todo punto incompatible con la nuestra. Sin embargo, insistí en que era cierto: las intervenciones de José Miguel en los seminarios de La Granda me parecían no sólo inteligentes, que eran muy sagaces y ponderadas, sino fuente que, pese a lo mucho escuchado de los protagonistas de la transición política, siempre traía algo nuevo y clarificador.
Ahora "Revoluciones imaginarias. Los cambios políticos en la España contemporánea" es un apasionado, "desapasionado" e ilustrado, análisis de un par de siglos hasta desembocar en la llamada transición que tan bien conoce como testigo, y hasta coprotagonista. De esa señora, doña Transición, creía yo ingenuamente que se habría dicho ya casi todo pero unas pocas páginas de Ortí bastan para convertir hogaño su obra en necesaria, imprescindible y novedosa. Además de perorar sobre el pasado, lo ocurrido ha poco, y, en particular acerca de la divagación de su original hallazgo de desvalorizar que en España no ha habido, ni de lejos, "revoluciones" que mereciesen ese mitificado nombre, nos plantea cuestiones de futuro en las que podemos o no discrepar pero que merecen general reflexión.
En aquellas mañanas estivales y luminosas de la Granda ya diferíamos ligeramente sobre el sistema electoral del que la democracia española, con muy leves variantes, ha sido deudora hasta el exceso. A mi modo de ver, al no contar con una circunscripción única como los franceses o los portugueses con la elección del Presidente de la Republica, el legislador español optó, con legitimidad y éxito, por el régimen parlamentario con base representativa provincial y la llamada corrección d'Hondt, que se ha mantenido casi inalterable hasta nos. Siguiendo a Ortí, con el que mis recuerdos coinciden, ante la predemocrática Ley de Reforma Política hubo fuerte disidencia de Fraga y los suyos de aquellas calendas, que buscaban la representación mayoritaria, también de base provincial, plegándose enseguida a la proporcionalidad corregida de Suárez, audaz siempre, y, tras propiciar el nacimiento del bipartidismo, todo prácticamente pasó a ser lo que es.
Hay, pienso, además cierto adocenamiento ciudadano, reacio a tolerar cambios. Sin embargo, los partidos minoritarios de vocación gubernamental nacional, es decir, ¡los no nacionalistas!, se sienten, con cierta razón, infrarepresentados y su reivindicación, errática o no, debe debatirse.
¿Qué va a ocurrir pues algo, a mi juicio, va a suceder? Esa pérdida al vacío de restos duele a partidos y seguidores, que son hipercrítica legión, aunque en países de antiguas democracias lleve siglos sin solucionarse.
Otro asunto de necesaria corrección es la llamada disciplina de voto que violenta a veces la conciencia de los diputados. Lo digo con la legitimidad que, con disciplina más liviana, tuve en diez años de Europarlamento donde me aparté, en ocasiones, de la indicación gestual, o escrita, del voto, sobre todo en defensa de los derechos de autor, de los derechos pesqueros de los saharauis y de las condiciones de expulsión de emigrantes, o en pura defensa de la jurisdicción asturiana (carbón, aluminio, cuota láctea y pesquera, angula, "efecto estadístico"...). Es asunto complejo, incluso muy complejo, pues determinadas instituciones corren riesgo de parálisis de generalizarse en la libertad completa de voto.
En cualquier caso, yo optaría por circunscripciones pequeñas de forma y manera que el diputado sea bien conocido por sus electores, con los que debe, o debería, estar en permanente contacto. Y, arreglada la cercanía diputado/elector, que debía ser, y no es, la base del sistema, los votos que no van al electo y superen unos mínimos preestablecidos puedan, o deberían, recuperarse quizá en una lista nacional.Piénsese en el hueco que ha propiciado Tabarnia.
Por último, como ha escrito aquí Natalia Vaquero, Ortí Bordás pudo haber sido el destinado al papel que correspondió a Adolfo Suárez. Como el abulense tenía los mismos orígenes azules, semejante proximidad a Torcuato Fernández Miranda, y la misma convicción de dirigirse hacia la Democracia y la Autonomía, esta sin duda retocando, ahora, competencias en materia de seguridad, ¡pensemos el desastre de los Mossos catalanes con el atentado de las Ramblas!, y las confusas competencias en materia de Educación, que deben arreglar de una vez la tentación a ignorar España y al español.
Pero hay algo en que Ortí y Suárez no se parecen en absoluto: el primero tiene una cultura, que se aprecia en el libro, y que faltaba en el más afamado actor de la pieza, Fernández Miranda dixit, teatral de la transición.
jueves, 15 de febrero de 2018
El Atlántico Noroeste frente al Mediterráneo
Ingeniero de Minas
El Atlántico Noroeste frente al Mediterráneo
Las credenciales de Asturias para reclamar las inversiones que requiere en infraestructuras
Vicente Luque Cabal 15.02.2018 | 03:52
El Atlántico Noroeste frente al Mediterráneo
El presidente de la Asociación Valenciana de Empresarios, Don Vicente Boluda, ha expuesto recientemente en una conferencia celebrada en Asturias la encomiable iniciativa del empresariado valenciano en torno al lema #QUIERO CORREDOR, referido al Corredor ferroviario Mediterráneo. La iniciativa es un ejemplo de cómo puede organizarse y actuar la sociedad civil y solo nos queda desear que, en las regiones del noroeste de España (Asturias incluida), sepamos seguir el ejemplo que nos brinda.
El Corredor Mediterráneo que plantea doble línea ferroviaria para mercancías y doble vía para pasajeros en Alta Velocidad desde Algeciras hasta la frontera francesa, recorriendo y uniendo todas las ciudades y puertos del litoral mediterráneo, es un proyecto faraónico, valorado en más de 30.000 millones de euros. No obstante, sus fundamentos (demanda de tráfico, beneficio económico y social, análisis coste/beneficio, etcétera) no están completamente demostrados.
Por otro lado y sin ninguna duda, lo que se ha dado en llamar "el Corredor Atlántico Noroeste" (formado por el Corredor Atlántico ya definido por la Unión Europea, extendido, entre otros, al puerto de Gijón/Avilés y la línea ferroviaria Gijón-Palencia) presenta credenciales mucho más poderosas que el Corredor Mediterráneo desde todos los puntos de vista. El Gobierno de España, a finales de 2017, cursó una petición oficial a la Comisión Europea para incluir en el Corredor Atlántico los puertos y líneas ferroviarias del Noroeste. Parece, por las noticias que llegan, probable que los organismos de la Unión Europea aprueben, en este año, esta modificación del Corredor.
Volviendo al asunto central de este artículo, según los últimos datos del Observatorio del Transporte y la Logística de España (OTLE), relativos al año 2015 y recogidos por EUROSTAT al nivel NUTS 2, el tráfico ferroviario con origen/destino (O/D) en el Noroeste Atlántico (macrorregión RESOE, es decir Galicia, Castilla y León, Asturias y Cantabria) fue de 3,65 millones de toneladas al año, que es superior al que cruza la frontera con Francia por el Corredor Mediterráneo, que fue, aquel año, de 2,47 millones de toneladas al año.
El tráfico ferroviario O/D de Asturias con el resto de España fue, también en 2015, de 2,71 millones de toneladas al año y, por lo tanto, este tráfico es superior al internacional del Corredor Mediterráneo con Europa y superior también a todo el trafico interregional de dicho Corredor que fue de 1,98 millones de toneladas al año.
Ésta comparación es muy significativa, puesto que el 10 de diciembre de 2010 circuló el primer tren de mercancías entre Barcelona y Lyon (Barcelyon) en ancho estándar. El puerto de Barcelona está equipado con anchos de vía estándar e ibérico y su conexión con Francia dispone de dos tramos transfronterizos, el convencional Portbou-Cervere con anchos ibérico (ES) y estándar (FR) y el nuevo enlace Figueras-Perpiñán por el túnel de Le Perthus con ancho estándar. Pues bien, con esta infraestructura ya desarrollada, el tráfico internacional de mercancías por el Corredor Mediterráneo hacia Europa no aumentó de forma sensible. Es muy significativo que por el nuevo túnel transfronterizo de Le Perthus solo circulan del orden de 1,2 millones de toneladas brutas al año.
Sus previsiones iniciales se basaban en conseguir 3,9 millones de toneladas en el primer año (2009) y, más adelante, 8,8 en 2019 y 18,6 en 2049. Es decir, parte del Corredor Mediterráneo existe desde hace ya tiempo, entre el puerto de Barcelona y la frontera francesa y, por decirlo así, no progresa adecuadamente. Cuando hemos consultado sobre las razones de estos retrasos en el desarrollo de esta infraestructura, las disculpas son múltiples y variadas. Así pues, ¿No sería conveniente comprobar si los conceptos de Corredor Mediterráneo y la España circular funcionan, antes de completar un proyecto tan grandioso?
El asunto es muy sencillo y se entiende con cifras ya existentes. De los 510 millones de toneladas al año que exporta/importa España, 408 (un 80 por ciento) lo hacen por los puertos y solo 3,8 (un 0,74 por ciento) lo hacen en modo ferroviario por la frontera francesa. Es decir, el tráfico ferroviario en España es radial (de los centros de producción a los puertos) y, si se quiere definirlo mejor, se trata de un tráfico mallado y policéntrico. El tráfico de productos siderúrgicos entre Asturias y Sagunto, por ejemplo, es similar a todo el tráfico ferroviario de mercancías interregional de todo el Corredor Mediterráneo y la línea ferroviaria de contenedores que mejor funciona de España es la existente, en ancho de vía ibérico, entre el puerto seco de Coslada y el puerto de Valencia.
El tráfico ferroviario de mercancías de Asturias, representa el 20 por ciento del total nacional, del que aproximadamente la mitad tiene como O/D otras regiones españolas. El puerto de El Musel es el de mayor tráfico ferroportuario de España. Y ello a pesar del problema que representa la histórica rampa del puerto de Pajares. Ésta debe dejar paso, cuanto antes, a la nueva infraestructura de la Variante de Pajares. En esta nueva infraestructura ferroviaria, tan necesaria y demandada, lo importante es que los trenes de viajeros en Alta Velocidad y los de mercancías puedan circular lo más pronto posible, por encima de discusiones absurdas e interesadas de anchos de vía, que es el menor problema de la comunicación moderna de Asturias con el resto de España.
Como recordatorio de la precariedad de los enlaces ferroviarios de Asturias, los asturianos acabamos de soportar un período de seis días sin tránsito de pasajeros por la rampa de Pajares debido a una fuerte nevada. Esta situación es inaudita en las comunicaciones del siglo XXI y debería llamarnos a todos a la reflexión y a la exigencia de responsabilidades.
Conviene también recordar al señor Boluda que, cuando la Ministra Ana Pastor, propuso migrar al ancho estándar en el Corredor Mediterráneo fueron los empresarios valencianos los que pidieron que se mantuviera también el ancho ibérico. Esta postura era entonces y es hoy lógica y razonable pues la migración del ancho ibérico al estándar debe hacerse de forma planificada y a medida que aumenten los flujos transfronterizos. Para acceder a los puertos, no hace falta el ancho estándar, por mucha modernidad que se quiera vender.
Nuestra conclusión es que Asturias tiene argumentos, muy sólidos y potentes, para reclamar las inversiones en infraestructuras que su progreso social y económico requieren. Nosotros también estuvimos en IFEMA el 3 de octubre de 2017 y quedó muy patente -"no faltará un solo euro para completar el Corredor Mediterráneo", dijo el Ministro- que el enfoque que subyace en las generosas ofertas que está haciendo el Gobierno de España, es político.
Consideramos que, por importantes que sean los argumentos y consideraciones políticas que todos entendemos, este criterio no debe ser un factor de planificación de infraestructuras faraónicas y abogamos por un Corredor Mediterráneo bien justificado, racional y que se base en criterios de solidaridad con el resto de regiones de España. Eso mismo deseamos, por méritos, al Corredor Atlántico Noroeste. Y por favor, no alaben tanto al Corredor Mediterráneo pues podría, al Noroeste español, dejarnos sin un duro para infraestructuras ferroviarias.
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viernes, 9 de febrero de 2018
INVERNADA Y GUANTES
LOS GUANTES
Trabuco, grotesco personaje vetustense, abusa, en un Casino que se mofa de sus frases campanudas y gestos esotéricos, de la utilización del guante como oferta de duelo, que luego, con ribetes trágicos, supondría la muerte del regente don Víctor Quintanar.
El rito del guante no es tan frecuente en la narrativa hispánica como en la gabacha de los espadachines, aunque Pereda, tan amigo de Clarin, ya ridiculizaba la perversa costumbre caballeresca de las afrentas al honor.
Cuando se adentra el invierno siempre echo de menos los guantes del año anterior que tardo en encontrar. En realidad busco más afanadamente el de la mano derecha que me permite evitar el frío de las barandillas a las que me acojo para subir escaleras. El de la izquierda enferma, que muchos me ríen por mi denodada devoción política a la sinistra, sirve de menos por mi quebrantada sensibilidad en esa mitad del cuerpo, afectada, tal fabulaba Valle Inclán, en su su control/descontrol por la magia del hemisferio cerebral opuesto.
Mi hijo y los suyos, pese a los embates del temporal paralizante, que tuvimos, por ejemplo, como regalo de Reyes, se decidieron a cumplir obligaciones laborales y escolares manteniendo viajes. No son, por supuesto, los ociosos mayorinos del Angliru pero tampoco es de recibo tengamos un Director General de Tráfico insultando la soberanía popular y hasta la inteligencia.
Tras rechazar Marco mis guantes, se los dejé a José, mi nieto, para esconderlos y si fuera menester cederlos al chófer, aunque un buen simbólico sopapo se merece ese torpe desafiante Trabuco de la DGT, empecinado en su puesto que, al parecer, lleva desde su casa vía telemática, como quería la cobarde paranoia bruselense de Puigdemont, gerundense, que no de la Tabarnia. Emilio Huerta/Triqui, dixit, denuncia también a un poncio municipal ovetense que utilizaba el teléfono, al menos para evadirse durante año y medio.
Por cierto, ¿se debería decir gerundense o girondense, pese a la identidad con los provenientes de la Gironde, trasladados al léxico político como enemigos de la revolución francesa...y los derechos humanos?
Nuevo éxito de Jonás en el PE con BCE
El Europarlamento aprueba un informe de Jonás Fernández sobre el BCE
09.02.2018 | 03:45
Jonás Fernández, a la derecha, durante el encuentro en el que presentó sus propuestas a Mario Draghi, presidente del Banco Central Europeo (BCE).
El Parlamento Europeo aprobó esta semana un informe del eurodiputado asturiano del PSOE Jonás Fernández que exige al Eurogrupo una lista con las candidaturas para el Banco Central Europeo (BCE), para ser discutida en la Eurocámara. El informe reclama "un papel central de la Eurocámara para cubrir las próximas vacantes" y "un protagonismo del Parlamento en la decisión sobre las próximas vacantes que deberá cubrir la entidad", a cuya vicepresidencia aspira el ministro español de Economía Luis de Guindos. La propuesta forma parte del informe sobre las actividades del Banco Central Europeo en 2016, del que Fernández ha sido ponente. "La lista debe incorporar el equilibrio de género", dijo Fernández durante el debate.
viernes, 2 de febrero de 2018
Toni Comín
TONI COMÍN
Fui amigo de su padre el admirable Alfonso Carlos Comín, que dio un paso social inmenso yendo a Málaga para su prestigiosa "La España del Sur", en el contexto de aquellas calendas predemocráticas.
Cuando conocí a Toni, entonces militante del PSC, en un avión que nos llevaba de Barcelona a Tel Aviv, creí que lo había visto de muy niño, pero no era así, pues estuve en casa de sus padres en 1966 cuando el exConseller, benjamín de los Comin Oliveres, no había todavía nacido.
Bien luego había vuelto a encontrar a Alfonso Carlos en el CIDOB, del también inolvidable Josep Ribera, en Lauria, o Lluria, 125. El catedrático, de Santiago, González Casanova, le consideraba "santo laico". Volví a verle a finales de 1977 cuando Comin Senior y yo mismo ya no militábamos en el FLP y el aspecto de mi amigo estaba afectado por la enfermedad que de una proverbial delgadez iba a una obesidad, que le hacía irreconocible y nada bueno presagiaba.
El casual encuentro sobre el Mediterráneo con Toni, todo jovialidad, me emocionó en el recuerdo de su progenitor, director de Nova Terra, colaborador de El Ciervo, que me había llevado a un discreto acto de solidaridad con el Padre Giner S.J., sufridor del siniestro T.O.P. Después Alfonso Carlos me contrató para un diccionario en el que escribí varias entradas, lo mismo que hice para Castañón, Mases y Cañada, en su encomiable Gran Enciclopedia Asturiana. Comín aceptó de aquella mi invitación a una conferencia en el Caserón de San Francisco que hubo de retrasarse hasta nunca.
En Palestina, una de mis sobrinas se encontró también con Toni. Ahora es famoso y estridente catalanista, que, como Ernest Maragall y Ferrán Mascarell, dio el paso a ERC y más tristemente a Junstpelsí, tapadera del latrocinio del tres percent, en el que jamás imaginaré pueda involucrarse.
Ya en Jerusalén, Toni me localizó para avisarme que coincidiendo con el viernes musulmán aparecería públicamente Mustafá Barghouti, aspirante a presidir la Autoridad palestina. Allí estuvimos Garcia Margallo y yo, que, entre otros, con Michel Rocard, ex primer ministro francés, y Mcmillan Scott, sobrino nieto de Lawrence de Arabia, representábamos a la Unión Europea, pero no hubo especiales consecuencias.
Desde entonces sigo la errática trayectoria de Toni y mucho me duele contribuya a la gloria económica, impune y perversa, de los jefes del gang, los afamados mafiosos Jordi Pujol, sobre cuya inmoralidad ya habían avisado Josep Tarradellas y Pascual Maragall, y Marta Ferrusola. Todo lo que le escribió el desnortado Carles, desde Bruselas a Lovaina, es para hacérselo mirar. Siento que tampoco Toni haya reaccionado de forma ética y radical. Ya advertía también el gran Tarradellas sobre la caída en el ridículo.
Como no reniego de mis amigos y conocidos, aunque no comparta sus derivadas, y mucho menos de mi trayectoria humanística y humanitaria, he mantenido en medio de la tempestad contacto epistolar y desearía que Oriol, Comin y Romeva, que es al que más conozco y estimo, solucionaran sus graves problemas personales y España salga adelante sin nuevos obstáculos vergonzantes. "Es el momento de la política" me escribe Romeva.
Pero, Puigdemont aparte, ¿qué hace Comin, con toda la herencia moral de su padre, deambulando por el mundo, convirtiéndose voluntaria o involuntariamente en obstáculo errante del asentamiento en Barcelona de la Agencia del Medicamento en que había puesto tanta ilusión?¿qué hace de escudero, no precisamente a la garcilasa manera de Alberti, tras ese tontaina de Puigdemont, incurso en tan grave delito de golpismo, en línea predecesora con Tejero/Armada/García Carrés?
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