LUIS DE SUSANA
Yo siempre le conocí, en la clandestinidad política, como Luis de Pravia pero bien supe luego que Luis Álvarez era más Luis de Susana por su carismática madre.
Eran notables los referentes pravianos de la calidad de Luis y de Maruja, su mujer, que bien extendían su influencia a Avilés. En el intermedio concejo de Castrillón recuerdo la tarde que Luis me trajo su traducción del inglés al español del libro de Daniel Cohn Bendit sobre 1968. Aquella versión de Dany, al que muy luego conocí como gran orador, desprendido de su utopía, en el Parlamento Europeo, me interesaba poco pues había leído el original francés, pero lo relevante era cómo un intelectual asturiano se adentraba con galanura en un pensamiento que, sin compartirlo en absoluto, debía formar parte de la dieta cultural de nuestro tiempo. Salvando épocas y teorías, Gandhi hizo su versión de Tolstoi en Sudáfrica.
Pravia fue capital de España, tras Cangas de Onís y poco antes que la corte astur se instalara en Oviedo. Le conté una vez a Tierno Galván el recorrido de la capital: Cangas-Pravia-Oviedo-León-Valladolid-Madrid-Valladolid-Madrid.
He conocido, además de Luis y Maruja, a otros pravianos de calidad sociopolítica: Eulogio García Fernández, José Manuel Álvarez, también llamado Pravia, Arango, María Jesús Álvarez.., En el envés, una de las pocas veces que hablé con Fraga Iribarne me expresó su admiración por Ricardo Álvarez Díaz, Pire, triste y también recientemente fallecido...
Eulogio, Gin, una personalidad singular, procesado del siniestro TOP por injurias al Jefe del Estado. Era Juez de Mieres y fue defendido por el entrañable Luis Vega Escandón. José Manuel Álvarez es autor de una magnífica biografía de Pedrayes. Jesús Arango, personalidad referente de la transición política, clave, entre otras, de la penetración progresista del campo asturiano, por el que sigue luchando, Quijote andarín donde los haya, desde Los Cabos, en cuyo Colegio profesó mi admirada Emilia Areces. María Jesús lidió con mano diestra la Junta General del Principado todavía en tiempos recientes.
Es precisamente Luis Álvarez mentor de nuestra hogaño Consejera de Agroganadería y Pesca, cuyo exitoso paso comunitario en la siempre difícil Bruselas, mi Brubru, todavía recuerdo.
Luis, sabio, prudente, humanista, que en lenguas romances significan lo mismo, de proverbial delgadez y ojos vivos...
Se fue con la discreción y ejemplaridad silente que vivió, allá en la Pravia egregia que contribuyó a democratizar. Tardé en saber de su ausencia al otro lado de mi iPad por lo que la pena en su hondura me durará, en la realidad y en la virtualidad, ambas muy suyas